Hay un mito popular que me encanta: si te acercas una caracola a la oreja podrás escuchar el sonido del mar en su interior. Os imagináis que bonito seria? Poder escuchar las olas y el bailar del agua siempre…
Es por eso que he llamado SEA SOUNDS a esta colección. Es un homenaje al mar, a su música y a la paz que nos transmite.
Estas pulseras, terminadas a mano una a una, están hechas en plata de ley maciza y llevan un cordón de nylon del color que elijas. La caracola mide 12×6’5 mm.
Una manera discreta de llevar un pedacito de mar siempre contigo estés donde estés.